jueves, octubre 26, 2006

Fórmulas repetitivas, o "más de lo mismo"

El siguiente artículo lo ví en el Foro del Proyecto Hispaotaku y a su vez, se aclara allí que éste fue tomado de Comiquero.com; me pareció bastante interesante y quisiera compartirlo con ustedes:

«No es algo nuevo que, cuando se encuentra una fórmula en un medio, se le sacará todo el jugo posible, hasta que ya no se pueda más. Pero cuando menos en los casos del anime y el manga, ésto se lleva a niveles exagerados. Cualquiera que vea a muchos de ellos con cuidado, se dará cuenta de que hay un buen número de clichés y fórmulas hechas en el mismo. Y no, no me refiero a la gota manga, los chibis ni detalles así, sino líneas argumentales completas. Y si todavía hubiera algún escéptico en ese sentido, podemos echarle un ojo a los temas más repetidos.

Armadura poderosa y muchacho heroico Prácticamente todo el género de los mechas se construye sobre esta premisa. El muchacho que debe de probarse a sí mismo, y que al mismo tiempo debe de cumplir su obligación como defensor de su ciudad/planeta/Universo. Ejemplos: Mazinger Z, Gundam o Godannar.

Muchacha normal que recibe poderes mágicos para cumplir una misión Nuevamente un género aparte: las Mahou shoujo. Aquí puede ser desde una hasta una legión de muchachas jóvenes e inocentes, que son dotadas de algún poder para poder realizar una misión encargada por alguna entidad más poderosa, o quizá su propia conciencia. En este caso tenemos Cutey honey, Sailor Moon, Mai HiME o Sakura Card Captor.

Muchacha que cae en un mundo paralelo Por algún extraño motivo, una chica común y corriente se ve transportada a un mundo distinto, en donde tendrá que reunir cierto número de objetos/personas/secretos para poder volver a su realidad. Usualmente, en ese mundo encuentra el amor de su vida, por lo que se le presenta la decisión de dejarlo o no. Los ejemplos: Inu Yasha, Fushigi Yuugi, Escaflowne y Miyuki Chan. El Hazard es un caso particular, pues aquí el protagonista es un chico. Pero fuera de eso…

Muchacho que se enamora de una mujer sobrenatural o extraordinaria El típico muchacho tímido que de pronto encuentra la mujer ideal, pero que de una u otra forma no es humana. Como botón de muestra están Video-Girl AI, Oh my Goodess!, Chobits, A.I. Love You, Dears o Urusei Yatsura.

Muchacho que tiene que convivir con más mujeres de las que puede manejar Aquí puede que el chico sea muy tímido, o que simplemente sea víctima de las circunstancias. Lo cierto es que se encuentra completamente abrumado por la presencia femenina, y tendrá que hacer lo posible para poder sobrevivir. En algunos casos, es el mismo protagonista el que las busca, para después encontrarse con que no es lo que esperaba. Ejemplos son Love Hina, Ranma ½, He is my Master y Bakuretsu Tenshi.

Joven que debe de superarse en alguna actividad Esto puede abarcar desde los deportes más mundanos, hasta actividades totalmente fantásticas. Usualmente, el mismo se reúne con varias personas que comparten su deseo, aunque curiosamente, en este caso no siempre hay amor de por medio, pues en muchos casos los protagonistas son niños, aunque no es la regla. Podemos mencionar en esta categoría Slam Dunk, Super Campeones, Pokemon o Meteoro.

Seres sobrenaturales que invaden el mundo para abusar de mujeres Este es casi exclusivo del hentai, que de hecho tiene su sub-género dentro del mismo, el tentacle-hentai. De acuerdo a los japoneses, los Infiernos deben de tener una severa escasez de elementos femeninos, pues lo primero que busca una criatura en el momento de llegar a la Tierra, es una mujer a la cual violar. Entre estos casos están Bible Black, Urotsukidoji, La blue Girl, Alien from the Darkness y Advanced Tina.

Obviamente, de cada una de las categorías se mencionó apenas unos cuantos ejemplos, pues en realidad de cada una de ellas se pueden mencionar decenas. Obviamente, el valerse de un cliché no significa de entrada que un anime o manga sea malo. Evangelion sigue siendo uno de los grandes favoritos a pesar de no ser más que una variante del estilo mecha, en donde cada uno de los pilotos tiene que probarse no sólo a sí mismo, sino ante sus compañeros. Del mismo modo, se pueden mencionar otra nutrida cantidad de los que no caen en ninguna de estas categorías, y que aún así no alcanzan a trascender.

Así que, el mejor consejo, no busquen los animes o los mangas por moda, por estilo o por el autor, sino simplemente por su calidad artística, ya sea narrativa o visual. Incluso autores muy reconocidos y de gran talento han tenido sus malos momentos – recordemos a Rumiko Takahashi – pero eso no les quita méritos. La calidad, ante todo, es lo que importa.»


Tomado de Comiquero.com

jueves, octubre 05, 2006

De género y estereotipos

Desde hace ya un buen rato me sentía sólo y sin fundamentos respecto a la idea que el comportamiento según el género de la persona no tiene nada qué ver con su orientación sexual y que, a su vez, ésta no es motivo de discriminación al igual que no lo es tampoco el género... Ahora por lo menos, tengo un marco teórico más o menos decente gracias a un link que encontré navegando en la red -no especifico exactamente donde por reserva de privacidad-. Se trata de éste y éste otro link.

Como podrán ver, nunca está de más leer un poco sobre sexualidad y quien diga que no le interesa leer al respecto porque "ya vi mucho sobre sexualidad en el colegio" o "yo ya tengo mucha experiencia en eso", debería reconsiderar y revaluar el valor de dichas afirmaciones. E igualmente aplica para cualquier área del conocimiento, pero eso es un tema pertinente a otro contexto y otra explicación.

lunes, octubre 02, 2006

Anécdotas del transporte público

El autobús urbano, ese infame medio de transporte tan cotidiano y aparentemente falto de gracia alguna, es una grandiosa fuente de anécdotas pintorescas que cuentan con todo el sabor tanto de lo bueno como de lo malo de nuestra idiosincrasia.

Me encontraba navegando en la web (¡oh, sagrada y perjudicial costumbre!) y me encontré de casualidad con este escrito, que me gustó bastante y es la fuente que me ha inspirado a escribir este post.

Aparte de los sucesos ya relatados en el anteriormente citado relato, podemos encontrar un sinnúmero de ocurrencias que con seguridad más de un lector habrá experimentado al abordar un bus urbano. Desde el infaltable vendedor de dulces/chulos/lápices/etc., pasando por las rechiflas cuando el conductor no quiere detener el vehículo cuando un pasajero se lo solicita para bajarse, hasta las tristemente célebres peleas entre conductores.

Ahora quisiera remitirlos a uno de esos rutinarios días de estudio, en los cuales me dirijo al sitio conocido como el Rodeo para abordar la ruta 303, que pasa al frente de mi colegio. La primer particularidad, aunque irrelevante, fue que me encontré con un compañero de clase, cosa que no suele pasar a menudo. Pero lo realmente llamativo era el sujeto pecualiar que se queda de pie aunque aun quedaban asientos disponibles. No me dio mucho tiempo para pensar la razón por la cual aquél sujeto permanecía de pie, hasta que empezó a hablar. Y vaya que lo hizo, puesto que su peculiar discurso ha resultado ser el que más gracia me ha causado entre todos los que he escuchado en un bus urbano: toda una antología acerca del bien y del mal, que pasó por temas tan pintorescos como los avances tecnológicos, el imperialismo de los EEUU e incluso la historia de cómo Luzbel pasó a ser un ángel caido -aunque con significativos errores-; todo ello relatado con una singular sencillez y por tanto una expresión verbal más bien pobre. Mi compañero y yo apenas acertábamos a mirarnos y a hacer uno que otro comentario espontáneo. Cuando llegamos al colegio, 10 minutos después de haber partido del Rodeo, el tipo aún continuaba hablando... Naturalmente, nuestra reacción al bajarnos del bus y ver que éste se alejaba, fue soltar una carcajada que desde hace rato teníamos contenida. Quizás aquél pobre hombre tuviera razón en su discurso (y lo admito, no era tan malo) pero ello no lo eximía de quedar ante todos como un gracioso loco.

Con esta breve y quizás para algunos insustanciosa anécdota me despido; si la crítica es positiva, prometo traer más anécdotas -a su debido tiempo, por supuesto-.